viernes, 10 de septiembre de 2010

Estos era patriotas













Francisco Acuña de Figueroa
Autor del Himno Nacional



Miembro viril, o miembro solamente
Le llama el diccionario... ¡Qué mezquino!
Sus nombres en el uso más frecuente
Son el nabo, el zurriago, y el pepino.

El cimborio, la tripa, y el virote
(flores son de la lengua castellana)
el visnago, la pica y la macana
son como la mazorca y el cipote.

El príapo, la porra, y el chorizo
El rábano, la pija, y el badajo;
Picha y ciruela en español castizo
son sinónimos todos del carajo.

El vergajo; la guasca, y mango
el tarugo, el lenguado, y la banana
el pito, y el vitoque... es cosa llana
que equivalen al chocho, y al zanguango.

La butifarra, el tronco, y la batata
O el lagarto, le llama cualquier topo
el aquello, o la cosa, la Beata
y el Fraile, la correa, y el hisopo.

Muchos suelen llamarle, el trompo, el sapo
otros, el motillón, y el calabrote;
los músicos, la flauta, o el fagote
y el artillero espeque, o sacatrapo.

Siguiendo a la metáfora la hebra
Llámanle, el narigón, el nene, el chato
el tramojo, el merengue y de barato,
van péndulo, panal, bicho y culebra.

La berenjena, la pistola, el dómine,
bien lo sabe cualquiera chuchumeco
todos vienen a ser carajo "in nomine"
lo mismo que el gazapo, y el muñeco.

En el estilo vulgar, llámanle el rabo
y algunos el peludo... ¡Impropio nombre!
pues por más pendejudo que sea un hombre
no tiene tales pelos en el nabo!

Tiene otros cien apodos que no cuento
que aplica cada cual, según su antojo
como el corvo, la pieza, el instrumento,
el mondongo, el apéndice, el hinojo.

El negocio, la polla, y la poronga
van como suplemento... y pica punto
que no falta purista que suponga
que esto el miembro, y cojones todo junto.

He aquí en todas sus fases, y conforme
a la ley, por el uso sancionada
con setenta y tres nombres señalada
aquella quisicosa-multiforme.

11 comentarios:

  1. Es un fragmento del famoso 'grimorie', el Chotanomicon!

    ¡No lo recite en voz alta, no sea cosa que algún dios antiguo y tentaculado levante su ciclópea cabeza y derrame su ira sobre nosotros!

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  2. Hay que tener cuidado con las chotacabras, también, sokón.
    Le extraigo este fragmento del Horror de Dunwich, donde advierte de los riesgos del descenso.

    Cuando el camino inicia el descenso, se atraviesan terrenos pantanosos que despiertan instintivamente una honda repulsión, y hasta llega a invadirle al viajero una sensación de miedo cuando, al ponerse el sol, invisibles chotacabras comienzan a lanzar estridentes chillidos, y las luciérnagas, en anormal profusión, se aprestan a danzar al ritmo bronco y atrozmente monótono del horrísono croar de los sapos. Las angostas y resplandecientes aguas del curso superior del Miskatonic adquieren una extraña forma serpenteante mientras discurren al pie de las abovedadas cumbres montañosas entre las que nace.

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  3. Con el chupacabras, Z. Quien sabe que otras cosas sacrílegas, impías, obcenas y abominables se lleve a la boca esa malinga criatura.

    Se sabe que Lavinia Whately se llevaba los tentáculos de Yog Sothoth(*) a cualquier lado, y después vio lo que pasó...

    BTW, las chotacabras en ese cuento ocupan el lugar de los psicompomos. Leyó el poema Psychopompos de HPL? Es suma y síntesis de toda la ficción gótica.

    (*) Algunos pronuncian Yog Sochota... por las dudas, insisto, no lo diga en voz alta.

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  4. Intrigada por la conjugación del verbo en el título, tropiezo con estos versos que han enmudecido el Diccionario de Sinónimos, Antónimos e Ideas Afines.

    Siga atusando sus bigotes, Zeta y disculpe la interrupción!

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  5. Son pequeños errores que sokón me ha enseñado a introducir en los textos para hacerlos más misteriosos, Susana.

    (Voy a buscar el poema, para leer esta noche justo antes de dormirme. La poesía predispone las ensoñaciones.)

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  6. Uno cualquiera lo saluda desde Punta
    ¡salud Acuña! y ya que estamos le pregunta
    ¿por qué será que en Uruguay le llaman choto
    a la víscera vacuna y no al hisopo?

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  7. no son errores, son el dedo en el pastel. abren la puerta a otras dimensiones. son el koan que desprende el satori, cachai?

    el lenguaje está en las metáforas y entre las palabritas, mirelo. ahí mismo.

    acá de nuevo.

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  8. En vez de choto le llaman chota. Como dice chokón. Chotacabras, etc.

    "Soy el koan que desprende el satori", me hace acordar al pato darwin, sokón.

    Disculpe, Marcelo, ¿desde qué Punta saluda?

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  9. Dada la temática, temo la respuesta de Marcelo.

    Hace *muchos* años había descubierto este poema gracias a un unipersonal de Alberto Restuccia (injusto ignorado).

    Zeta, le confieso que (post anterior), me fui de cabeza a buscar "morcilla de Charconac" (empecé por "boudin de Charconac", en realidad), seguro de descubrir algo culinariamente maravilloso...

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  10. Es el poder de la ficción jahey. Estoy seguro que va a encontrar alguna especialidad de Charconac. Y si no, va a haber que inventarla.

    (Ahora, no se me escapa cuánto mejoraría el texto si existiera una morcilla de Charconac. Si fuera un buen escritor me pondría ya mismo a operar la realidad para solucionar esa falta.)

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  11. me parece encantador que el autor del himno nacional escribiera esta maravilla. La conocí hace tiempo y Arango me la refrescó hace poco en una referencia en su libro "las malas palabras"

    habrìa que musicalizarlo.

    Cantarlo de pie

    Pero no con la mano en el corazón, claro.

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